Fuiste mi verano de Neïra, Daniela 2. RESEÑA

La vida de Daniela ha dado un giro completo en los últimos meses, un cambio radical al que, inevitablemente, tiene que adaptarse. Si echa la vista atrás, todo es diferente. Martín y Nieves ya forman parte de su pasado, un pasado que siente muy lejano. Pero no solo ellos han desaparecido de su vida, sino que Luca, el mismo chico que fue para ella una balsa a la que aferrarse con fuerza para no ahogarse, también lo ha hecho y Daniela se ve obligada a aprender a caminar sola.
Lo que pasa es que, en ocasiones, el azar hace de las suyas y se inmiscuye en ese camino, haciendo que nos crucemos con personas que creímos que nunca regresarían. Y todo vuelve. Y de repente el camino es más pedregoso de lo que parecía. Y caerse es demasiado fácil. 
Daniela se enfrenta al presente con más cargas que nunca, con sentimientos que se le anudan en el estómago y que se esfuerza por esconder, con un pasado convertido en cicatriz, pero, pese a todo ello, con unas inmensas ganas de vivir, ser más ella misma que nunca y conseguir todo aquello que cree merecer.

RESEÑA:

Hola a todos. Como habréis podido leer en anteriores entradas del blog, estaba deseando que llegara el día trece para comenzar con la segunda parte de Fuimos un invierno. Este segundo libro de la bilogía Daniela Neira se llama Fuiste mi verano.

Tras leer La lista de Oliva supe que Neira se iba a convertir en una de mis escritoras favoritas. Una tarde, un café y unas horas por delante fueron lo que necesité para beberme la historia de Oliva. Ese día terminé llorando abrazada a una almohada como si se me fuera la vida. Desde ese momento supe que todo lo que escribiera Neira lo tenía que leer. No hablo solo de unas historias de amor preciosas, hablo de sentimientos reales descritos de forma magistral. La autora no solo me cuenta una historia de dos, Neira desgrana las inquietudes, las dudas y las consecuencias a través de la protagonista principal para que conectes con ella de una forma real, como lo harías con un amigo o con un ser querido. He comenzado Fuiste mi verano con la piel erizada y con un cariño especial, el buen sabor de boca que me dejó Fuimos un invierno ha hecho que la historia de Daniela se convierta en imprescindible.

Voy a empezar con la parte que más me conmovió y desconcertó de la historia. Luca, es la duda que todos los lectores nos hemos hecho estos días de atrás, ¿que va a pasar con él? Al protagonista lo entendí en el libro anterior. Comprendí a través de las palabras de Daniela, que es un hombre que se asustó cuando comenzó a experimentar nuevos sentimientos, que no fue capaz de gestionarlos como a la protagonista le hubiese gustado, pero es que no podemos pedirle a los demás que actúen como lo haríamos nosotros. Luca fue un soplo de aire fresco en la vida de Daniela cuando más lo necesitó, pero la procesión va por dentro y Luca, también estaba sufriendo y eso lo llevó a tomar decisiones drásticas.

Volviendo a la segunda parte, ha pasado el tiempo para Daniela y este periodo le ha servido para reflexionar y poner en orden sus sentimientos después de lo ocurrido. En esta parte encontramos a una mujer más fuerte y decidida a comenzar con nuevos proyectos, pero el pasado sigue tarareando una melodía triste; una halo de esperanza no la deja avanzar como a ella le gustaría.

Daniela inicia un juego para protegerse y para desprenderse de esa sensación frustrante que la viene acompañando tiempo atrás. Pero lo que pensó que era pan comido se convierte en nuevas dudas. Toma decisiones dirigidas por la rabia y el rencor porque necesita volver a sentir lo que sintió junto a él, en el invierno más maravilloso de su vida. Pero, todos necesitamos explicaciones para poder perdonar bien y para pasar página. Daniela se enfrentará a una lucha interna que te dejará pegado al libro.

En esta segunda parte, conoceremos más a fondo a otros personajes como a la madre de la protagonista. Me pareció necesaria la entrada en escena de esta mujer para aconsejar a Daniela en un momento de fragilidad. Me emocionó la conversación que tuvo con ella y me gustó la simpatía con la que cerro el diálogo. En Fuiste mi verano tendremos reencuentros que no esperamos y más sorpresas.

Para mí, el perdón es lo que envuelve a esta trama, no solo en el terreno amoroso sino que va más allá. Cuando terminé el libro tuve una sensación de calma absoluta y es que Neira analiza los sentimientos de cada personaje y te transporta a cada escena con detalle. El vocabulario es claro, nada enrevesado y cuando te das cuenta te has adentrado en la historia con el corazón en un puño.

Para concluir mi opinión diré que Neira siempre me hace disfrutar con sus libros. Tiene una forma de escribir que me emociona. Lo mismo me ocurrió con Oliva y Mario, me llegó al corazón con la misma fuerza. Sus personajes son reales y sin traumas, porque no es necesario estar reñido con el pasado para cometer errores. Os animo a que leáis esta serie y me digáis que os ha parecido, para mí en un cinco estrellas como todo lo que escribe esta autora. Neira ya guarda un lugar especial en mi corazón.

ENLACES DE INTERÉS.

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SI QUIERES ESTE LIBRO PUEDES ADQUIRIRLO DESDE AQUÍ. Fuiste mi verano (Daniela nº 2)

FRAGMENTO DEL LIBRO:

Me he dado cuenta de que las personas nunca llegamos a conocernos del todo, porque, cuando piensas que conoces tus puntos débiles igual de bien que los fuertes, te encuentras con álguien que hace que todo se tambalee y que consigue que de repente no le encuentres sentido a nada de lo que haces, y te sorprendes a ti misma actuando como nunca pensante que lo harías. Incluso llegando al limite de hacerlo como tantas veces criticaste en otros.