
PERDIDA EN TÍ
“Eres mi Adicción 2″ de Laurelin Paige
Autora: Laurelin Paige Género: Erótico
Editorial: Suma de letras Serie: 2º Eres mi adicción
El amor está cerca pero los secretos acechan…
Sipnosis: Alayna Withers solo ha tenido un tipo de relación: la que la convierte en una persona obsesiva y acosadora. Ahora que Hudson Pierce la ha dejado entrar en su corazón está decidida a construir unos cimientos que se basen en algo más que un sexo increíble. Pero ambos guardan secretos que los empujan hacia la desconfianza.
Alayna acude a la única persona que mejor conoce a Hudson: Celia, la mujer con la que estuvo a punto de casarse. Alayna establecerá con ella un vínculo que irá demasiado lejos y que conducirá a la revelación de secretos sobre Hudson que podrían acabar con su amor para siempre.
Esta es la primera relación en la que Alayna no ha entrado en una espiral descontrolada. Y, aun así, podría perder a Hudson
OPINIÓN PERSONAL:
Si no has leído la primera parte de dejo aquí el enlace «Adicta a ti»
En esta segunda parte de la trilogía podemos ver como la relación entre Hudson y Alayna se convierte en algo verdadero, por lo que vale la pena luchar y esforzarse.Están en un punto de la relación donde ya no sólo están pasando el rato, sino que se está convirtiendo en algo más profundo, él le pide dar un gran paso al que Alayna no podrá negarse.
Alayna ya le ha dicho a Hudson lo que siente, y aunque él no lo diga, ella sabe que algo muy fuerte lo conecta con ella. Pero el miedo de Alayna por caer en las viejos hábitos está siempre latente y no sólo por sus propias obsesiones, sino también por las costumbres de él.
Hudson ha demostrado su madurez y su gran poder en todos los aspectos, pero ya lo tenia antes.
Con su serenidad habitual, él ha asimilado que sus sentimientos son lo más parecido al amor, algo que no ha sentido nunca.
-“Alayna, ¿Estas conmigo?”
-“Siempre —respondí—. Siempre estoy contigo.”
He tenido la sensación de que en este libro el ganador ha sido Hudson, que como hombre controlador e impulsivo ha conseguido salirse con la suya y obtener su bien más preciado, a ella.
No estaba segura de que me fuera a dejar llevar la voz cantante. Rara vez lo hacía en lo referente al sexo…; ni en lo referente a nada.
Pero él sólo sabe amar a su manera, la protege, la mima y complace en todos los sentidos, sobre todo con sexo… Aunque no es capaz de verbalizar sus sentimientos. Es un hombre atormentado, a si que no lo busquéis…
Ambos siguen guardando secretos y Alayna ve en Celia, la mejor amiga de Hudson, la persona correcta para que le cuente más cosas sobre él, de su pasado y de algunos secretos que la protagonista cree que Hudson le esconde.
Aunque en esta historia de amor lujurioso, no solo van a estar acechados por la bruja del cuento, sino que hay otros protagonistas secundarios que también pondrán piedras en el camino a esta relación.
Alayna, en cambio, ha logrado combatir casi todos sus miedos, pero lo ha aprendido de la peor forma posible: a base de palos, pero ha sacado conclusiones y ha asimilado la importancia de tener unos valores, como la sinceridad, ya que hasta el momento por su enfermedad no lo había comprendido y utilizaba la mentira como una vía de escape. Ha ganado parte de la batalla a su enfermedad.
Hudson y Alayna luchan cada uno a sus armas por la relación, él con su seguridad en sí mimo y su poder de manipulación y ella dejándose llevar por él.
Es un libro que se lee de forma rapidísima, también tengo que decir que los diálogos a veces me han resultado un poco pastosos y me hacían perder el hilo de las conversaciones.
En esta segunda parte para mí fue obvio lo que estaba sucediendo,no hubo nada en concreto que lograra destacar, excepto un secreto que me dejó con la boca abierta.
Pero el pasado de Alayna vuelve, fue una de las cosas que más me ha gustado de la novela y ahora tiene que hacerle frente.
Si llegue a conectar con el cambio que se estaba produciendo en Alayna y Hudson, en como ambos empiezan a controlar sus obsesiones y en como también mantienen la esperanza para poder deshacerse de ellas por completo, aunque como ya he dicho antes no lo van a tener fácil.
“Quiero que estés aquí porque te quiero conmigo. Siempre
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